Victoria de los junior ante Maristas de Vigo por 69 a 56

LIGA GALEGA JUNIOR MASCULINA-JORNADA 8

CB ARTAI, 69-MARISTAS DE VIGO,56

CB ARTAI ( 17­+14+19+19) :Fer Mariño (10), José (3), Damián (23), Carlos (2),Dresma (10)-cinco inicial-Javier (4), Sergio Cebral (5), Sergio García (2), Nico, Pablo y Jorge (8).

MARISTAS A (16+12+17+11): Gómez (18), Santos (4), Martín (16), Fernández (10), Jorge (6)-cinco inicial-Fernández, Prieto (2), Rodeiro, Padín, Ferreiro, González y Prol.

ARBITROS: Mónica Betanzos y Edda Beltrán, ambas de A Coruña. Sancionaron con 14 faltas a los locales y con 16 al cuadro visitante. Muy permisivas en el juego, no gustaron al equipo visitante, lo que valió las quejas de su entrenador, Vicente Rodríguez, “Cholas”, quien al final de partido se quejó a ellas en los siguientes términos: “ el arbitraje fue malo, casero y sin criterio”, como aparece reflejado en el acta.

INCIDENCIAS: Partido disputado en la mañana del sábado en el pabellón de la Zona Escolar de Carballo, con más de cien aficionados en las gradas de la instalación carballesa con numeroso público llegado desde Vigo.

Sexta victoria de los carballeses ante otro de los equipos favorito a estar en la parte alta de la clasificación. Y es que visitaba Carballo el equipo de Maristas de Vigo, dirigido desde el banquillo por uno de los históricos de los banquillos gallegos, Cholas, el que fuera seleccionador nacional durante muchos años y que llego a dirigir a la selección en las Olimpiadas de Atenas, junto a un Mundial y un Europeo. Ganaron los locales, invictos en lo que va de liga en Carballo un partido tremendamente complejo, arisco y duro en muchas fases sacando lo mejor de su repertorio ofensivo y sobre todo, defensivo.

Empezaron mal las cosas para los de casa, quienes recibían un parcial de 0 a 6 en un abrir y cerrar de ojos. Mal la defensa y peor el ataque para los de Moreira, quien tenía que pedir su primer tiempo muerto en el minuto tres.Enderezaban el rumbo en ataque y los dos equipos ofrecieron los mejores minutos del partido con un continuo intercambio de canastas y con una defensa por parte de ambos equipos muy blandita. El segundo cuarto comenzaba lo que se iba a ver en lo que restaba de partido; los dos equipos basando su fortaleza defensiva en una zona y con ataque cada vez más lentos. El rtimo se ralentizó y para cada canasta se sudaba tinta china.Ambos equipos iban al descanso con un marcador de 31 a 28.

Y tras el descanso, los locales por fin le tomaron el pulso al partido; la defensa presionante, a toda la pista, se atragantó a los jugadores de Cholas, que pasaban verdadero apuros para pasar el medio campo, y además el ataque local comenzaba a ser más fluido, donde todos los jugadores aportaban puntos al marcador local. Este modo de juego se mantuvo en el cuarto final, con los locales dominando el “tempo” del partido, con ventajas siempre cercanas a la decena de puntos.